María Hadad Castillo. |
Por Daniel Ramos
Chetumal, 27 de febrero.- La Administración
del Patrimonio de la Beneficencia Pública, posee un presupuesto de casi un
millón de pesos, para atender las demandas de más de mil personas de escasos
recursos que acuden diariamente a solicitar ayuda. A dos meses de haber
iniciado el año, las demandas de apoyo van a la alza, especialmente de personas
que solicitan sillas de ruedas al ser mutilados a causa de diabetes e insuficiencia
renal crónicas, las mas frecuentes.
A pesar de
los pobre del recurso con que cuenta la Beneficencia Pública, sobrelleva la
demanda que al día va en incremento. Esta dependencia también trabaja con
donativos que aportan otras dependencias, sin embrago, se ha logrado cubrir los
requerimientos de personas que solicitan el apoyo, dijo la dirigente de esta
dependencia, María Hadad Castillo.
“Desafortunadamente
tenemos un presupuesto muy pequeño, poco más de un millón de pesos, pero
también trabajamos con donativos que buscamos. Estamos trabajando especial
mente con personas discapacitadas. Las mas requeridas son sillas de ruedas,
auxiliares auditivos, muletas, bastón y algunos medicamentos”, agregó.
Mencionó que
a dos meses de haber iniciado el año, se ha incrementado las demandas. “Ha habido
mucha demanda de sillas de ruedas, especialmente por personas que han perdido
alguna extremidad a causa de la diabetes e insuficiencia renal crónica”,
apuntó.
La dirigente
de la dependencia, dijo haber recibido instrucciones por parte del mandatario estatal,
para que intensifiquen los trabajos. Ahora realizaran las visitan a las casas
de personas de escasos recursos y más necesitadas, sin la necesidad de que
acudan a las oficinas a buscar apoyos.
Finalmente,
mencionó que para el mes de junio y apoyados por el Desarrollo Integral de la
Familia (DIF), estatal, entregarán de auxiliares auditivos en apoyo a personas
con este tipo de discapacidades.
Y es que
para comprar una silla de ruedas, auxiliares auditivos o prótesis de algún
miembro, es una tarea casi imposible de alcanzar, ya que los costos van de mil
900 pesos de una silla de ruedas estándar, a 25 mil pesos el costo de una
prótesis de pierna, lo que difícilmente una persona en situación vulnerable
podría adquirir.
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